Congo Actualidad n. 167

ÍNDICE:

EDITORIAL: Con un mínimo de voluntad es suficiente.

  1. REANUDACION DE LOS COMBATES ENTRE LAS FARDC Y LOS REBELDES DEL M23

    1. Reanudación de las hostilidades.
    2. La caída de la ciudad de Goma.
  2. LAS DECLARACIONES DE LA COMUNIDAD INTERNACIONAL.

  3. LA CONFERENCIA INTERNACIONAL SOBRE LA REGION DE LOS GRANDES LAGOS.

  4. LA TOTALIDAD DEL INFORME FINAL DE LA ONU.

  5. LAS PROPOSICIONES DE LA SOCIEDAD CIVIL.

 

 

EDITORIAL: CON UN MINIMO DE VOLUNTAD ES SUFICIENTE

 

Final sin sorpresa.

Goma, capital del Kivu del norte, una provincia de la República Democrática del Congo (RD Congo), cayó en manos del grupo terrorista denominado Movimiento del 23 de marzo ( M23), que contó con el apoyo de las fuerzas armadas de dos países vecinos, Ruanda y Uganda. Se trata de un amargo epílogo como consecuencia de una serie de infiltraciones, de complicidades internas y de traiciones, pero también, y sobre todo, a una política económica esclava de intereses económicos de un sistema occidental basado en un capitalismo salvaje.  Este, sumido en una crisis profunda, trata de sobrevivir sobre los cadáveres de un pueblo, cuya tierra es muy rica en minerales esenciales para la tecnología actual.

No sorprende la caída de Goma. Durante dieciséis años, a partir de 1996, cuando empezó la guerra de AFDL, Kivu sufre las interferencias y la influencia de Ruanda y de Uganda, hasta el punto de que se convirtió en víctima de operaciones regulares de agresión y de invasión, lo que ha causado millones de muertos, de desplazados y refugiados al extranjero, saqueos, violaciones….

 

Como los tres monos.

 

Frente al sufrimiento del pueblo congoleño, la comunidad internacional se ha mostrado siempre indiferente y pasiva, más preocupada por financiar la construcción de confortables hoteles  y edificios ostentosos en Kigali, en Ruanda, destinados a albergar las oficinas de exportación de los minerales provenientes del saqueo a Kivu, y etiquetados en Kigali como si fueran de producción propia. Kigali se ha convertido en la plataforma del comercio mafioso internacional de la casiterita, del coltán y del oro que se extraen en Kivu.

Occidente le ha confiado a Kigali el trabajo sucio de suministrarle los minerales provenientes de Kivu al precio más ruin posible, debido a la evasión fiscal en la frontera congoleña. Esta es la razón, a pesar de ser plenamente consciente de los crímenes cometidos por el régimen ruandés en el este del Congo, por la que Occidente pretende no saber, no ver y no oír.

Esto es lo que ha sucedido en el Consejo de Seguridad de la ONU.  Estados Unidos ha rechazado incluir los nombres de los oficiales ruandeses en la lista de personas sancionadas, tal y como recomendaba el grupo de expertos de la ONU  para la RD del Congo, y para ello sostiene que no está en condiciones de presentar una prueba clara y formal de la implicación de Ruanda en el conflicto de Kivu.

 

Que nadie diga: “no lo sabía.”

 

El informe final del grupo de expertos de Naciones Unidas, sin embargo, adoptado por el Consejo de Seguridad y publicado oficialmente el 21 de noviembre, ha confirmado las alegaciones relativas al papel desempeñado por Ruanda en el conflicto armado en el este de la República Democrática del Congo: apoyo militar directo a los rebeldes del M23, facilitación del reclutamiento, facilitación de las deserciones de las FARDC, aprovisionamiento de armas y municiones, informaciones y consejos de índole política. La cadena de mando cuenta con Bosco Ntaganda y sube hasta el Ministerio de Defensa Ruandés con el general James Kabarebe.

La Comunidad Internacional no puede permitirse guardar en un cajón de despacho este informe o tirarlo a la papelera, al igual que hizo con los anteriores informes de la ONU y de las organizaciones internacionales de defensa de los derechos del hombre. No puede seguir actuando como si este informe no existiera y decir después: “no lo sabía”. Ahora,  ya sabe que el tan alabado desarrollo económico de Kigali, Singapur y África, se basa en el contrabando de los minerales de Kibu, al vergonzoso precio de numerosas víctimas congoleñas inocentes.

 

Compromisos urgentes.

 

La Comunidad Internacional debe, por tanto, replantear urgentemente su política con respecto a Ruanda: no puede aceptar cooperar con un régimen criminal y asesino. Con la aparición, el pasado mes de junio, de la primera parte del informe, algunos países de la comunidad internacional tomaron tímidas medidas frente a Ruanda. Sin embargo, ahora ya no podemos limitarnos a acciones simbólicas, aisladas y no concertadas: la situación actual requiere una acción más firme contra los países que contribuyen a crear inestabilidad en la RD Congo, en particular contra Ruanda. EURAC, la red europea de las asociaciones para África Central, solicita a la Unión Europea, a sus estados miembros, al conjunto de la comunidad internacional, a la ONU y a la Unión Africana (UA) lo siguiente:

 

  • Condenar de manera firme el apoyo de Ruanda y Uganda al M23 y exigir a estos dos países que cesen de prestar su apoyo y condenen esta rebelión.
  • Parar la ayuda presupuestaria de la Unión Europea a Ruanda, y de esta manera respetar la puesta en marcha del Acuerdo de Cotonou con respecto a los derechos humanos y la democracia, que constituyen las condiciones necesarias para otorgar la ayuda presupuestaria.
  • Incitar a los estados miembros a cesar su cooperación militar y a reprogramar su ayuda presupuestaria a Ruanda en la medida en que el gobierno de este país haya apoyado una rebelión en un país vecino, la RDC.
  • Solicitar al comité de sanciones de la ONU que prevea sanciones dirigidas a los altos responsables ruandeses (como el general James Kabarebe), ugandés y congoleño que se mostraron activos en la desestabilización del este de la República Democrática del Congo y que son directa o indirectamente responsables de los crímenes cometidos  contra  la población civil.

 

Algunas otras organizaciones de la Sociedad Civil proponen sanciones incluso más severas:

Imponer a Ruanda un embargo en la compra de armas.

Suspender las importaciones de minerales que exporta Ruanda.

Anular la nominación de Ruanda como miembro no permanente del Consejo de Seguridad de la ONU.

 

El camino de las sanciones severas no cuesta nada y es, probablemente, más eficaz que numerosas operaciones militares. Basta, únicamente, con un mínimo de voluntad.

 

1.  REANUDACION DE LOS COMBATES ENTRE LAS FARDC Y LOS REBELDES DEL M23.

 

a)      Reanudación de las hostilidades.

 

El 15 de noviembre, las fuerzas armadas de la RDC (FARDC) y  los rebeldes del Movimiento del 23 de marzo (M23), han reanudado las hostilidades en los alrededores de Kibumba, a 30 km al norte de Goma (Kivu del Norte). Estos combates se reanudan tras haberse observado una tregua de casi tres meses en la región. El actual presidente de la conferencia de los Grandes Lagos, el presidente ugandés Museveni,  fue el artífice de esta tregua informal. Alberga en su país, en Kampala, negociaciones indirectas y secretas, entre emisarios de Kinshasa y del M23.

Los beligerantes se acusan mutuamente de haber desencadenado las hostilidades.

“Las FARDC (fuerzas armadas de la RDC) avanzaron con el fin de atacarnos (…), hemos tenido que defendernos”, ha afirmado el teniente coronel Vianney Karazama, portavoz militar del M23, anunciando una respuesta calificada de auto-defensa.

El ejército ha desmentido esta versión. El portavoz de la 8ª región militar, el coronel Olivier Hamuli, acusa los rebeldes del M23 de haber atacado, desde las 8 de la mañana, las posiciones de las FARDC, a este de Kibumba. “No les hemos atacado, es un pretexto. Sabíamos que, desde más de dos semanas, estaban reforzando sus posiciones”, ha afirmado.

En Goma, que cuenta 300 000 habitantes, las escuelas se cerraron a mediodía. “La gente está viviendo con el miedo en el cuerpo “, con estas palabras se sincera Omar Kavota, portavoz de la federación de ONG de la Sociedad Civil de Kivu del Norte. Con el ataque del jueves, “hemos observado un flujo de desplazados hacia el campo de Kanyarucinya”, a unos diez kilómetros de Goma, añade Kavota.

“Donde yo vivo, los rebeldes se han posicionado en la localidad de Kabindi. Saquean, para poder comer, patatas y cabras de los habitantes. Nos amenazan con matarnos si no nos marchamos”, recoge el testimonio de un habitante de la región. Cinco civiles que llegaron al centro de salud de refugiados de Kanyaruncinya, cerca de Goma, dicen que, en Kimbumba, los rebeldes del M23  realizaban tirios en dirección de los edificios de casas de civiles. “En Kimbumba estábamos encerrados en casa cuando los rebeldes del M23  atacaron. Los FARDC los han perseguido entre la maleza. Entonces, los rebeldes comenzaron a disparar a las casas, y una bala me alcanzó en el antebrazo. Cuando las FARDC han controlado la situación, hemos conseguido huir hasta Kanyarutchina donde recibí primeros auxilios,” relata un rescatado de Kibumba.

 

A primera hora de la noche, Lambert Mende, portavoz del gobierno en Kinshasa, ha anunciado que los combates arrojan como resultado 51 muertos y 3 heridos en las filas del movimiento rebelde y ha confirmado la presencia  de soldados ruandeses en primera línea. “Se han recogido 51 muertos que llevaban el uniforme del ejercicio ruandés”, ha declarado, sin embargo, sin dar cifra alguna sobre eventuales víctimas en las filas del ejército regular. De esta manera, Lambert Mende denuncia una vez más, el papel de Ruanda y llama a la comunidad internacional a prever verdaderas sanciones contra el régimen de esta país. Según el portavoz del ejército regular en Goma, el teniente coronel Olivier Hamuli, un comandante de las FARDC ha resultado muerto.

Siempre durante la noche, el gobernador de la provincia de Kivu del norte, Julien Paluku, ha constatado la muerte de 113 rebeldes “vestidos con el uniforme ruandés”, pero las autoridades provinciales han establecido el balance de al menos 150 muertos en las filas de sus adversarios. Por su parte, el teniente coronel Vianney Kazarama, portavoz militar del M23, desmiente cualquier baja, y señala que ha habido nueve soldados enemigos muertos.

 

El 16 de noviembre, el mayor Didier Makelele Kasekeka, uno de los portavoces del brazo armado del M23, afirma que algunos efectivos se dirigen hacia la ciudad de Goma: “ En respuesta a lo que sucedió ayer, nos dirigimos a Goma. Estaremos allí de aquí al lunes. Estamos decididos a desalojar al gobierno de Goma”. Sin embargo, el jefe del departamento de comunicación del brazo armado del M23 , el teniente coronel Vianney Kazarama, desmiente esta afirmación: “ no queremos tomar Goma. Nos defendemos de los ataques de las FARDC y deseamos que pronto se abran negociaciones con las autoridades congoleñas”.

Christophe Beau, responsable de la protección de los refugiados y de los desplazados para el alto comisariado a los refugiados (HCR) de la ONU, ha afirmado que, a lo largo del día, 1500 familias han llegado al campo de Kanyarunciya, lo que representa aproximadamente 7000 personas. “Han llegado cientos de desplazados con sus familias, sus animales de corral, sus cabras, sus corderos y algunos efectos personales”. Ha contado, de manera anónima, un miembro del personal del campo.

 

En la madrugada del 17 de noviembre, se han reanudado los combates entre las FARDC y los rebeldes del M23 en Kibumba, una ciudad situada a aproximadamente 30 km. al norte de Goma. El portavoz de las FARDC, Olivier Amuli ha confirmado que el M23 ha atacado de nuevo objetivos del gobierno. La MONUSCO ha apoyado al ejército con helicópteros de combate.

El portavoz de la Sociedad civil de Kivu del norte, Omar Kavotha, ha afirmado que las fuerzas rebeldes del M23 han recibido recientemente refuerzos llegados de Ruanda. “ Hemos sabido que más de tres camiones Mercedes Benz , llenos de efectivos ruandeses, han atravesado una vez más la frontera, el pasado viernes entre 14 y 15 horas, pasando por Ndjerina en el distrito de Rubavu y por tanto de Ruanda. Sin embargo, durante la noche del viernes a este sábado, se han añadido otros efectivos ruandeses”, ha declarado.

Según los testimonios de los desplazados procedentes de Kibumba, en la mañana el M23 ha tomado el control de las dos agrupaciones  de Kibumba y Buhumba, en territorio de Nyirangongo.

El gobernador de Kivu del norte, Julien Paluku, ha declarado que el ejército congoleño se había replegado de Kibumba, ya que los miles de combatientes ruandeses, aproximadamente 3500 soldados que cruzaron la frontera, apoyaban a los rebeldes.

El portavoz del M23, Vianney Kazarama, ha declarado que por el momento, los rebeldes no tienen intención, a menos de ser atacados por las FARDC , de proseguir los combates hacia Goma.” Los efectivos revolucionarios del M23 controlan el territorio de Kibumba. Solicitamos al presidente Kabila que se siente en la mesa de negociaciones para obtener un compromiso político. Si las FARDC intentan de nuevo una ofensiva, les perseguiremos y los expulsaremos fuera incluso de la ciudad de Goma.”

Durante la noche, el portavoz del gobierno de la RDC, Lambert Mende, ha declarado que para apoyar a la M23,” han llegado 4000 hombres en columna motorizados y a pie procedentes de territorio ruandés”. Según un informe de un consejo de ministros extraordinario celebrado en Kinshasa, se trata de “tres batallones RDF (Rwanda defence force, ejército ruandés), dirigidos por un oficial, el general de brigada ruandés Ruvusha y dos unidades especiales de la RDF, de las cuales una unidad de artillería pesada dirigida por el general ruandés, Gatama Kashumba”.

No existe “ningún soldado de la RDF (Rwanda defence force, el ejército ruandés)” , en RDC, según ha asegurado el portavoz del ejército ruandés, Joseph Nzabamwita.

 

El 18 de noviembre por la mañana, se han reanudado los combates sobre la línea principal en el agrupamiento de Kibati, situado a 17 kilómetros de Goma. Según el ejército congoleño, los rebeldes del M23 habrían lanzado un nuevo ataque a partir de Kayanja, al agrupamiento de Kibati, tras una noche de calma. Militares del ejército regular han abandonado Kibati. El teniente coronel Vianney Kazarama, portavoz militar del M23, ha “ puesto sobre aviso” la misión de la ONU para la estabilización de la RDCongo ( MONUSCO) , instándole a que cese de sostener al ejército regular en los combates y amenazando con una respuesta. Los rebeldes del M23 han continuado a acercarse a la ciudad de Goma, aunque afirma que su objetivo no es tomar la capital regional.

Tras la intervención de helicópteros de la ONU para proteger las inmediaciones del aeropuerto, los rebeldes del M23 detienen su progresión en Munigi,  a 3 Km aproximadamente del aeropuerto de Goma, es decir, a más o menos 10 km. del centro de la ciudad de Goma. Sin embargo, amenazan con “tomar la ciudad” si son atacados por el ejército. El responsable militar del Movimiento del 23 de marzo (M23), el coronel Innocent Kayina, ha indicado que ha instalado su puesto de mando a la altura del campo de Munigi, campo principal de las Naciones Unidas a la salida de Goma, protegido por un batallón sudafricano.

Según el vicegobernador de Kivu del norte, Feller Lutaichirwa, las autoridades militares han decidido retirarse con el fin “de evitar un baño de sangre” en Goma.

Cunde el pánico en la población de Goma, en Kivu del norte, a medida que los combates se acercan a la ciudad. Las calles de la ciudad de Goma se quedan desiertas. El tráfico y el transporte público no funcionan. Las gasolineras, las tiendas y los comercios están cerrados. Los pocos fieles que se dirigían a la iglesia tuvieron que darse la media vuelta. Cientos de militares del gobierno volvían del frente a pie, en moto o a bordo de sus jeeps. Numerosos desplazados llegaron a Goma con sus colchones y sus efectos personales cargados sobre sus cabezas o a sus espaldas , cansados por una marcha de varias horas. El ejército regular ha colocado carros en todos los rincones estratégicos de la ciudad, especialmente en el camino que conduce al aeropuerto internacional de Goma.

 

En un comunicado publicado en la noche del 18 de noviembre , los rebeldes del M23 exigen del gobierno congoleño el cese de las hostilidades y la aceptación de negociaciones directas en 24 horas. Estas negociaciones deben implicar particularmente a la oposición congolesa, la sociedad civil y asimismo a la diáspora. Exigen especialmente el mantenimiento de todos los oficiales en sus grados y rechazan la “mezcla” que quiere imponer Kinshasa, lo que les alejaría de su zona de influencia en el este de la RD del Congo. Exigen igualmente la desmilitarización de la ciudad de Goma y de su aeropuerto, controlado por el ejército leal al gobierno, apoyado por la MONUSCO, así como la reapertura de la frontera de Bunagana. Si no se satisfacen sus exigencias, el M23 anuncia en un comunicado su voluntad de proseguir su resistencia contra el gobierno de Kinshasa hasta su caída.

Todavía durante el día 18 de noviembre el opositor Vital Kamerhe, presidente de la Unión por la nación congolesa (UNC) ha indicado al gobierno congoleño que “es el momento de bajar las armas y de hablar con los rebeldes con el fin de evitar que se repita la historia” . En el transcurso de declaraciones a la prensa sobre la situación de la seguridad en el este de la RD del Congo, Vital Kamhere estima que “como el ejército está ‘infiltrado’, los militares congoleños van a morir en el frente para nada”. Ha añadido que “resulta completamente inútil que pretendan hacernos creer que van a poner cerrojos que evitarán que la ciudad caiga. Hay que elegir el menor de los males. No hay vergüenza alguna en negociar”.

 

Por su parte, el portavoz del gobierno Lambert Mende ha afirmado que el gobierno de la RD Congo “no negociará” con los rebeldes del Movimiento del 23 de marzo (M23). Según él, “son fuerzas ficticias colocadas por Ruanda para disimular sus actividades criminales en RD Congo y escapar a las sanciones internacionales. Preferimos negociar con Ruanda, el agresor real, en el seno de la Conferencia Internacional sobre la región de los Grandes Lagos”. Sin embargo, ha admitido que la cooperación internacional resulta difícil.

 

El 19 de noviembre, se observa una tregua sobre la línea del frente en Munigi situado a 10 km al norte de la ciudad de Goma. Las fuerzas armadas de la RD Congo así como el M23 no se han movido de sus posiciones, según indican fuentes militares. Las fuerzas armadas de la RDC ( FARDC) y los rebeldes del M23, separados únicamente por aproximadamente 1 km, mantienen por cada lado sus posiciones.

En Goma, las escuelas han permanecido cerradas, así como las tiendas y los supermercados. La circulación es escasa, salvo algunas patrullas de las FARDC. De igual forma se ven  blindados ligeros de las Naciones Unidas en algunos cruces. De igual manera, la carretera que lleva al norte de la ciudad  y bordea el aeropuerto está desierta. Los desplazados del campo de Kanyarunchinya situado al norte de Goma han tomado la dirección del campo de Mugunga, que cuenta actualmente con más de noventa mil desplazados, al sur de la ciudad. Algunos de ellos han pasado la noche al borde de la carretera. Otros  se alojan con familias de acogida en cabañas rudimentarias. Los que han llegado a Mugunga dicen que les falta de todo, sobre todo de comida y agua.

Por la tarde se produjeron enfrentamientos entre los rebeldes y el ejército congoleño. Los rebeldes han tirado varios obuses de mortero en dirección al aeropuerto  ocupado por la guardia republicana congolesa y el campo militar de Katindo. El jefe del estado mayor del M23, el general Sultani Makenga , ha calificado de “inevitable” esta reanudación de los combates, debido a la negativa del ejército congoleño de retirarse de Goma. Al final e la tarde, el portavoz del ejército ruandés , el general Joseph Nzabambita, ha acusado al ejército congoleño de haber “deliberadamente” bombardeado Ruanda con un tanque y morteros. El ejército congoleño  refuta haber ordenado tales disparos. “Ninguna orden de disparar se ha dado en dirección de Ruanda”, ha declarado el portavoz del ejército congoleño en Goma, el coronel Olivier Hamuli. Sin excluir la posibilidad de un disparo accidental, ha anunciado que hay una investigación en curso y concluye: “ Si es un acto aislado, solo compromete a un individuo”.

 

b. La caída de la ciudad de Goma.

 

En la mañana del 20 de noviembre, los rebeldes del M23 han tomado el control del aeropuerto estratégico de Goma que hasta entonces había sido defendido por miembros de la Guarida Republicana apoyados por la MONUSCO. Tras algunos enfrentamientos, las FARDC han abandonado la ciudad y puesto rumbo a Sake, 27 km. más lejos. Hacia la mitad del día, una columna de rebeldes del M23 entró en la ciudad de Goma  y progresó hacia el centro de la ciudad y hacia la cercana frontera ruandesa. En los barrios, los habitantes de Goma afirman que los rebeldes del M23 les pidieron que siguieran con sus ocupaciones habituales. Algunos de ellos no esconden su decepción. Han declarado que se sienten traicionados por el gobierno. Los rebeldes del M23 seguidamente han tomado el control de los puestos fronterizos de la vecina ciudad ruandesa de Gisenyi.

Tras haber tomado el control de la ciudad, el portavoz militar del movimiento rebelde del M23, el coronel Vianney Kazarama, lanzó por la tarde un llamamiento en la radio local de Goma para pedir a los militares y a los policías de servicio en la ciudad su rendición. Les pidió que se presentaran el miércoles a las 8:00 ( 7:00 GMT) al estadio de fútbol de Goma para ser grabados y para identificarse.  Hizo un llamamiento a la población para que  “permanezca tranquila” y para que se reintegre a sus ocupaciones habituales-

Según algunas fuentes, los rebeldes del M23 han cometido graves violaciones de los derechos del hombre: han herido civiles, perseguido secuestro de niños y de mujeres, destruido propiedades e intimidado a los periodistas y a todo aquel que haya intentado oponer resistencia a su avance.

Desierta al principio de la mañana, la ciudad ha comenzado a tener animación por la tarde, incluso si no circulaba ninguna moto-taxi. Al final de la tarde, se empezó a registrar tímidamente algo de actividad en Goma, pero todos los comercios permanecieron cerrados.

En el transcurso de un discurso a la nación pronunciado en Kinshasa, el presidente congoleño Joseph Kabila ha llamado al pueblo y a todas las instituciones del país a  movilizarse “ contra la agresión de la que la RD del Congo y especialmente Goma, están siendo objeto”. “ la RD del Congo se encuentra confrontada a una situación difícil”, ha declarado el jefe del estado y añade que, “cuando se impone una guerra, tenemos la obligación de resistir”. Asimismo, también ha anunciado que el embajador de la RD del Congo en Ruanda ha sido llamado a consultas a Kinshasa desde hace varias semanas.

Los miembros del gobierno provincial de Kivu del norte  abandonaron Bukavu donde se habían refugiado tras la toma de Goma, sitio de las instituciones provinciales, por los rebeldes del Movimiento del 23 de marzo. Fuentes cercanas a este gobierno señalan que los ministros de la provincia se han instalado en Beni, desde donde cuentan con continuar a gobernar la provincia. El vice gobernador de Kivu del norte, Fuellar Lutahichirva, ha anunciado que las instituciones judiciales y la comandancia militar de Kivu del norte se ha des localizado también en Beni. “ Esta medida será de aplicación hasta que se restablezca la autoridad del estado en Goma” , ha asegurado. El gobernador de Kivu del norte, Julien Paluku, dice que teme “ masacres selectivas” por los rebeldes del M23, e indica que ciertas fuentes le han informado que “ las casas de las personalidades cercanas al poder de Kinshasa son visitadas por los hombres de Sultani Makenga ( jefe militar del M23)”.

El 21 de noviembre, los habitantes de Goma han retomado paulatinamente sus actividades. No se ha oído ningún tiro en la ciudad durante la noche. La gente circula y han vuelto a aparecer tanto los taxis colectivos como las moto-taxi. Sin embargo, numerosos comercios permanecieron cerrados . Ninguna patrulla de las Naciones Unidas fue visible en la ciudad. Las bases de la MONUSCO están herméticamente cerradas con centinelas en los miradores.

 

El 21 de noviembre, el M23 ha invitado a los efectivos de las FARDC y de la policía aun presentes en la ciudad a rendirse y a integrar la rebelión. “ A un soldado, el gobierno paga 50 dólares mientras que un diputado nacional cobra 4500. Debéis venir con nosotros por el bienestar de los militares”, ha lanzado el portavoz del M23 a los policías y soldados reunidos en el estadio.

“ No terminaremos en Goma, iremos hasta Bukavu, Kisangani y Kinshasa para «liberar” a la totalidad del país”, ha lanzado el portavoz militar del M23, el coronel Vianney Kazarama, en el estadio de la ciudad. Vianney Kazarama ha pronunciado un discurso ofensivo contra el presidente congoleño. Ha pedido “el apoyo” de la población de Goma para permitir a su movimiento “ expulsar a Kabila” del poder. “ Kabila debe abandonar el poder porque no ganó las elecciones del años pasado”, ha añadido, aludiendo a las acusaciones de fraude formuladas por la oposición contra Kabila a la presidencial de noviembre de 2011.

 

Más de 750.000 congoleses han huido de sus pueblos y de sus casa desde el inicio de los enfrentamientos en abril, lo que ha causado una muy grave crisis humanitaria en el este de la RD del Congo. Frente al avance del M23, miles de desplazados han abandonado los campos de refugiados al norte de Goma, para buscar refugio bien sea en la ciudad bien sea en otros campos de desplazados.

Más de cincuenta y cinco mil nuevos desplazados han llegado al campo de Mugunga 3 , situado al sur de Goma.  Estos últimos se añaden a los sesenta mil del campo de Kanyarushinya que han encontrado refugio en Mugunga 3 tras la ocupación  de las localidades situadas al norte de Goma por los rebeldes del M23. La presidenta  del campo de Mugunga, Charlie Amunazo, habla de una situación muy preocupante. “por el momento, estos desplazados están expuestos a la intemperie y no tienen, desde que han llegado, nada para comer. Ni agua, ni medicamentos, el personal que se ocupa del dispensario, desbordado y agotado, se ha marchado”, cuenta, lamentándose de que no se atienda a los enfermos. “¿Se imaginan a qué catástrofe vamos a asistir?”, se lamenta, y teme la propagación del cólera y de la disentería. “ Me temo que eso se convierta en algo más grave que la guerra armada”, previene. El jefe de la oficina de Ocha en Kivu del norte reconoce que la situación es dramática.

 

2. LAS DECLARACIONES DE LA COMUNIDAD INTERNACIONAL.

 

El 17 de noviembre, en una declaración, el portavoz del ministerio de Asuntos Exteriores de Francia, Philippe Lalliot, “ha llamado al cese inmediato de los combates y ha pedido a todos los países de la región que se abstengan de toda injerencia en los asuntos interiores de la RD del Congo”.

Al final de una reunión de urgencia solicitada por Francia, el consejo de seguridad de la ONU ha condenado de forma enérgica la recrudescencia de los ataques perpetrados por el M23  y ha pedido el fin de su avance hacia Goma, la capital de Kivu del norte y que “ cualquier apoyo exterior y suministro de equipamiento al M23 cesen de forma inmediata”. El Consejo de Seguridad ha anunciado asimismo su intención de aplicar sanciones suplementarias dirigidas contra los dirigentes del M23, así como a todos los que violan el régimen actual que concierne el embargo sobre las armas. Los rebeldes disponen especialmente de equipamiento de visión nocturna que les han permitido lanzar su ofensiva sobre Kibumba, a 25 km. de Goma. Recientemente han adquirido también morteros pesados de 120 mm.

 

El 18 de noviembre, la representante de la diplomacia europea, Catherine Asthon, en un comunicado “ solicita a los rebeldes del M23 de cesar inmediatamente su ofensiva militar sobre Goma”, y añade que “ cualquier apoyo al M23, en clara violación al régimen de sanciones y del embargo sobre las armas, debe cesar”. Dice sentirse muy inquieta por las consecuencias humanitarias de la nueva explosión de violencia, ha señalado que2 todas las partes deben permitir un acceso total a la ayuda humanitaria para aquellos que lo necesiten”. La jefa d ella diplomacia europea ha destacado que “ la UE está particularmente inquieta en cuanto a la suerte de más de 70 000 personas desplazadas que han comenzado a abandonar el campo de Kanyaruchinya situado al norte de la ciudad”. La representante de la política extranjera de la UE “llama igualmente a todas las partes, inclusive a los países vecinos, a tomar todas las medidas necesarias para evitar un mayor deterioro de la situación y para prevenir la extensión del conflicto”.

 

El 19 de noviembre, al margen de una reunión de los ministros de Asuntos Exteriores de la Unión europea” en Bruselas, la UE ha reclamado el cese inmediato de la ofensiva de la rebelión del M23 y ha expresado su “grave preocupación” frente a la crisis humanitaria en Kivu del norte, mientras que los motines se hallan a las puertas de la principal ciudad de esta provincia, Goma.

“La UE renueva su condena del grupo rebelde del M23 y de otros grupos armados en la región y reclama el cese inmediato de la violencia, incluida la violencia sexual, las violaciones de los derechos del Hombre y del reclutamiento de niños soldados. La UE condena firmemente los pasos efectuados por el M23 para establecer una administración paralela (a la de Kinshasa), en las zonas que controla”. Según el texto, “las tentativas de minar la seguridad, la soberanía y la integridad territorial de la RD del Congo no deben ser toleradas”.

La UE dice “tomar nota” del informe de un grupo de expertos de las Naciones Unidas en el que acusan a Ruanda y a Uganda de sostener el M23- especialmente en armas, en clara violación de un embargo decretado por la ONU- y expresa su “profunda preocupación” frente a estos informes sobre la persecución de un apoyo exterior a los grupos rebeldes en el este de la RD del Congo.

Los ministros europeos hacen un llamamiento a todos los que están implicados- sin citar jamás a Ruanda y a Uganda, ni aludir explícitamente a la posibilidad de sanciones a estos dos países-a poner fin de manera inmediata a este apoyo y a respetar la soberanía y la integridad territorial de la RD del Congo.

 

El 19 de noviembre, la presidenta de la comisión de la Unión Africana (UA), Dr. Nkosazana Dlamini Zuma, ha firmemente condenado la ofensiva militar lanzada por el M23 en la zona de Goma y ha pedido a este grupo de poner fin de manera incondicional e inmediata. Ha reiterado la necesidad de que todas las partes implicadas cooperen totalmente con  los esfuerzos que se están realizando en el marco de la Conferencia Internacional en la Región de los Grandes Lagos (CIRGL), con el pleno apoyo de la UA.

 

El 19 de noviembre, el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, ha llamado al presidente ugandés Yoweri Museveni para pedirle que use su influencia con el M23, al igual que le había preguntado al presidente ruandés Paul Kagamé.

 

El 20 de noviembre, Ruanda, acusado por Kinshasa y la ONU de mantener el Movimiento del 23 de marzo (M23), ha tomado nota de la caída de la ciudad, ha pedido al gobierno congoleño que negocie con los rebeldes del M23. La ministra ruandesa de Asuntos Exteriores Louise Mushikiwabo, la cual desmiente el apoyo de Kigali al M23, ha llamado al gobierno congoleño a un “ diálogo político” directo con los rebeldes, negociaciones con toda la oposición que ya exigieron los rebeldes a las que, sin embargo, hasta ese momento Kinshasa se había negado. “Lo que ha sucedido hoy en Goma muestra claramente que la opción militar (…) ha fracasado y que el diálogo político es la única opción”, ha afirmado la ministra ruandesa.

 

Durante la noche del 20 de noviembre, el Consejo de Seguridad de la ONU ha votado por unanimidad una resolución propuesta por Francia, que condena la toma de Goma por el M23. Esta resolución exige igualmente a sancionar con el bloqueo de las cuentas y con la prohibición de viajar a dos jefes rebeldes: Innocent Kaina y Baudouin Ngaruye. El consejo exige la retirada inmediata de los rebeldes de Goma y pide igualmente “el cese inmediato” de cualquier apoyo exterior al M23, sin nombrar de manera explícita a Ruanda y Uganda. Ni uno ni el otro niegan su implicación.

En la resolución, se solicita al secretario general de la ONU, Ban Ki-moon que en los próximos días citen los nombres de los países que apoyan a los rebeldes del M23.

 

La resolución no incluye  sanciones contra Ruanda como se había planteado. De hecho, Estados Unidos rechazaron la inclusión de oficiales ruandeses en la lista de sanciones como recomienda el panel de expertos sobre la RD Congo. Los diplomáticos afirman que la ONU no está en disposición de presentar una prueba flagrante y formal de la implicación de Ruanda.

Sin embargo, un informe de expertos independientes de la ONU acusa sin ambages a los responsables ruandeses de “suministrar consejos estratégicos y de apoyo logístico” a los rebeldes y de “desempeñar un papel en el apoyo de las actividades políticas del M23”. Según un alto responsable de la ONU, las pruebas del papel de Ruanda, en particular, son numerosas: nuevas armas, equipamientos de visión nocturna, nuevos reclutamientos que hablan inglés y, sobre todo, nuevas tácticas que han permitido coger por sorpresa a los hombres de la MONUSCO (el contingente de la ONU en el país) y a las fuerzas del orden congolesas. Según otro responsable de la ONU, las fuerzas del M23 han doblado su número para alcanzar a 3000 personas. Utilizaron ametralladoras sofisticadas para tirar y alcanzar un helicóptero de ataque de la MONUSCO (sin que haya heridos).

 

Human Right Watch (HRW) reprocha a Estados Unidos que no haya querido mencionar  a los responsables ruandeses en la resolución. De hecho, Estados Unidos únicamente han condenado la “violación de la soberanía de la RD Congo” y ha pedido a Ruanda que demuestre su influencia.

“Si el Consejo de Seguridad quiere realmente proteger a la población civil de Goma, debe enviar un mensaje más claro a Kigali. Puede causar sorpresa el silencio inexplicable de Estados Unidos en ese punto, a pesar de su influencia sobre Ruanda. En nombre de los civiles de Goma, Washington debe apoyar que haya sanciones inmediatas a quienes, desde el extranjero, apoyan al M23”, ha declarado el responsable de HRW, Philippe Bolopion.

 

El 21 de noviembre, a la salida de una reunión  a puerta cerrada del  Consejo de Seguridad en Nueva York, el embajador de Francia en Naciones Unidas ha afirmado que el Consejo de Seguridad ha requerido a los rebeldes del M23 que se retiren de Goma y a retomar las posiciones de antes de la violación de la tregua observada con el ejército congoleño (FARDC) desde el verano anterior (en Bunagana, territorio de Rutchuru). El  embajador estadounidense en su puesto en Kinshasa ha lanzado el mismo llamamiento.

 

El 22 de noviembre, el primer ministro británico David Cameron ha llamado al presidente ruandés Paul Kagame y le ha exhortado a que “presione” a los rebeldes del M23 para que se retiren de Goma.” David Cameron ha indicado claramente que la comunidad internacional no podía ignorar las pruebas del vínculo de Ruanda con el M23, y que el presidente Kagame debía demostrar que el gobierno de Ruanda no tenía vínculo alguno con el M23”, ha añadido el portavoz del Primer ministro británico. David Cameron ha llamado al presidente de la RD del Congo Joseph Kabila, al que ha “animado a trabajar de manera estrecha con Ruanda y Uganda para poner en práctica el comunicado” común firmado el 21 de noviembre.

 

El 23 de noviembre, la representante de la UE de Asuntos Exteriores, Catherine Aston, ha solicitado el “cese inmediato” de la ofensiva de la rebelión del M23 y ha exigido su retirada de Goma. Ashton “anima a todas las partes implicadas a trabajar de buena fe, con el propósito de poner en práctica rápidamente el acuerdo alcanzado el 21 de noviembre en Kampala”. “La UE, en estrecha colaboración con la ONU y con otros partenaires internacionales están listos a apoyar la región en sus esfuerzos para contribuir a alcanzar una solución duradera a la crisis”, ha insistido Ashton.

 

3. LA CONFERENCIA INTERNACIONAL SOBRE LA REGIÓN DES LOS GRANDES LAGOS

El 21 de noviembre, estando reunidos en Kampala (Uganda), los presidentes Yoweri Museveni de la República de Uganda, Paul Kagame de la República de Ruanda y Joseph Kabila de la República Democrática de Congo “exigieron a los rebeldes del Movimiento del 23 de marso (M23) que cesaran de inmediato  la ofensiva y que se retiraran de Goma”.

“Se les está transfiriendo un plan para este fin [al M23, NDLR”, según un comunicado conjunto que revela también que “el gobierno congoleño se comprometió en buscar rápidamente las causas de los desórdenes [al este de su territorio] y de remediarlas de la mejor manera posible”. Sin embargo, para delimitar el marco de estas conversaciones futuras, el presidente Joseph Kabila ha subrayado que “todo nuevo paso o contacto entre el gobierno y el M23 se basará en el informe de evaluación del acuerdo de 2009, redactado por la Conferencia Internacional sobre la Región de los Grandes Lagos”. Es una pequeña apertura para unas negociaciones con el M23 que entonces tratarían únicamente de las cuestiones militares planteadas en su momento por el M23. Se cierra la puerta, pues, a las negociaciones políticas ampliadas a todos los actores políticos y sociales que reclaman hoy el M23 y muchos otros políticos congoleños.

Según el mismo comunicado, los presidentes Museveni y Kagame dijeron claramente, que “aunque exista reivindicaciones legítimas por parte del grupo rebelde conocido con el nombre de M23, no pueden aceptar la extensión de esta guerra ni aceptar la idea del derrocamiento del gobierno legítimo de la RDCongo o el debilitamiento de su autoridad”.

Según ciertas informaciones, el presidente Kabila contemplaría negociaciones con el M23 y estaría dispuesto a examinar sus reivindicaciones. Sería de hecho, el memorándum del M23, hasta ahora rechazado por el jefe del estado congoleño, el que estaría a la orden del día de Kampala, pero sin la participación de los principales interesados: los dirigentes del M23. Según ciertas fuentes, Jean-Marie Runiga y sus compañeros reivindicarían puestos ministeriales, la rehabilitación de los oficiales del M23 que fueron degradados y revocados de los FARDC y su continuidad en el Norte-Kivu, la verdad en las votaciones, el respeto de los derechos del hombre, la democracia etc.

El 22 de noviembre, el presidente del M23, Jean-Marie Runiga, declaró que el M23 exige un diálogo con el presidente congoleño, Joseph Kabila antes de retirarse de Goma. “Hay que sentarse alrededor de una mesa con la sociedad civil, la diáspora, la oposición, el gobierno, para que se pueda hablar de todos los problemas de los congoleños. Hay problemas y reivindicaciones que son específicos del M23, pero también está el problema de la democracia en la RDCongo, problemas de gobernabilidad, problemas sociales y problemas que conciernenlos derechos del hombre”, enumeró el Sr Runiga Lugerero, que añadió que “la ofensivacontinuará mientras las negociaciones no estén abiertas”. Después se marchó a Kampala, para encontrarse con el presidente Ugandés Yoweri Museveni que le había pedido entrevistarse con él.

Según Saïd Abbas Ahamed, enseñante de negociación y geopolítica en la escuela de Rouen Business School, “las reivindicaciones oficiales presentadas por el M23 no constituyen una razón para entrar en guerra. No son más que un pretexto para engañar a la gente. En realidad, el M23 pedirá al gobierno que vuelva a proteger a Bosco Ntaganda, ya que el Congo le protegió de 2009 a 2011. Después pedirá que asegure a sus hombres que, si entran en las filas, no se les desplegará a otra parte del Congo, sino que se podrán quedar en el lugar donde viven. Por último reclamaran, para poder influir a la vez en la provincia del Norte-Kivu y en los asuntos a nivel nacional, tener más personas en el estado mayor y en los círculos donde se toman las decisiones”.

 

4. LA TOTALIDAD DEL INFORME FINAL DE LA ONU

El 15 de noviembre, una fuga de la versión del informe del grupo de los expertos para le RDCongo apareció de forma oficiosa en internet. En ella, la agresión de la RDCongo por la República de Ruanda está confirmada. Este informe definitivo fue elaborado teniendo en cuenta la carta del gobierno ruandés, sin embargo esta carta no produjo una revisión de las conclusiones de los expertos de la ONU porque según ellos, los elementos aportados por Kigali no constituyen” elementos de fondo”.

La versión final del informe de los expertos de las Naciones Unidas, ya disponible, confirma que el apoyo de Ruanda al M23 es evidente. En consecuencia, Ruanda viola el embargo de las armas. Está demostrado que oficiales ruandeses han ayudado militarmente al M23 y lo han reforzado de forme permanente. Esto consolida la tesis de la agresión a la RDCongo por Ruanda en detrimento de aquella que declara que se trata de una rebelión de congoleños en contra de su gobierno. Incluso las famosas unidades especiales de Fuerzas de Defensa de Ruanda (RDF) estacionadas en Rutshuru para llevar a cabo operaciones conjuntas con los FARDC y para las cuales se hizo un montaje muy mediatizado de la vuelta a casa, están citadas claramente en el informo que declara que han servido de canal para suministrar una ayuda sustancial al supuesto motín del M23.

El informe de la organización mundial dice, además, que se reclutó a centenares de niños (niños y niñas) en algunos pueblos ruandeses, para el M23, bajo la supervisión directa del Ministro ruandés de Defensa, el general James Kabarebe. Dice también que hubo una recaudación de fondos para el M23, organizada por miembros del Frente Patriótico ruandés que es el partido al poder y que la mayoría de los heridos del M23 están atendidos en un centro médico situado en el aeropuerto militar de Kanombe a Kigali. Añade que los hombres del M23 que fallecen en el frente son enterrados por soldados de los RDF.

Según el informe, el antiguo general Bosco Ntaganda  sigue siendo el comandante mayor de los supuestos rebeldes, siendo Ruzandisa alias Makenga el responsable de las operaciones y de la coordinación con los grupos armados aliados al M23. Laurent Nkunda del cual se dijo que estaba bajo arresto domiciliario en Ruanda, pudo trasladarse a la frontera a Runyoyi, para visitar las tropas de los RDF y del M23 a las cuales dio ánimos.

El informe indica con todo detalle que los minerales exportados por Ruanda provienen del suelo congoleño, principalmente de las cooperativas mineras artesanales del este del país. Estos minerales se venden en el extranjero de forma totalmente ilegal.

En cuanto a unas acusaciones proferidas a veces en contra de los FARDC, el informe señala que se han observado algunas colaboraciones circunstanciales en algunos casos entre algunos sujetos aislados de los FARDC y algunos responsables de los FDLR. Sin embargo, no hay ninguna prueba de una cooperación entre los FDLR y el gobierno de la RDC:

Después de este informe final, no hay nada que pueda explicar la postergación de la comunidad internacional para condenar sin ambages a Ruanda e infligirle sanciones que le obliguen a detener su empresa nefasta de desestabilización de la RDCongo. Esto es lo que el gobierno congoleño espera obtener de la reunión del Comité de sanciones de las Naciones Unidas.

La versión final del informe (S/2012/843) del grupo de los expertos para la RDCongo ha sido aprobada y publicada oficialmente el 21 de noviembre.

 

5. LAS PROPOSICIONES DE LA SOCIEDAD CIVIL

El 20 de noviembre, en un comunicado publicado al día siguiente del encuentro de los Ministros de Asuntos Exteriores de la UE, EurAc, la plataforma de las ONG que actúan en la Región de los Grandes Lagos  lamenta el hecho de que la UE ha demostrado, una vez más, una falta de coherencia en el lenguaje utilizado en las conclusiones del Consejo: En efecto, aunque se refiera a los apoyos exteriores que ha tenido el M23, no se menciona a Ruanda  y Uganda como los países responsables de la reanudación del conflicto en RDC. Sin embargo, el informe del grupo de expertos de las Naciones Unidas confirma las acusaciones relativas al papel de Ruanda en este conflicto armado al este de la RDC: apoyo militar directo a los rebeldes del M23, facilitación del reclutamiento, facilitación de las deserciones de los FARDC, abastecimiento en armas y municiones, informaciones y consejos políticos. La cadena de mando cuenta con Bosco Ntaganda y alcanza al Ministerio de Defensa ruandés, el general James Kabarebe.

En este contexto, la comunidad internacional no debe de conformarse con acciones simbólicas, aisladas y no concertadas en contra de Ruanda. La situación actual exige una mayor firmeza frente a los países que contribuyen a la inestabilidad de la RDC.

EurAc y sus miembros piden a la Unión Europea y a sus estados miembros que:

  • Condenen firmemente el apoyo de Ruanda y Uganda al M23 y exijan a estos dos países que cesen de ayudar a esta rebelión y que la condenen
  • Detengan la ayuda presupuestaria de la UE a Ruanda para acatar la aplicación del Acuerdo Cotonou en relación a los criterios de respeto de los Derechos del Hombres y de la democracia, que representan las condiciones necesarias para otorgar ayuda presupuestaria
  • Inciten a los Estados miembros a detener su cooperación militar y a volver a programar su ayuda presupuestaria a Ruanda considerando que el gobierno de Ruanda ha apoyado una rebelión en un país vecino, la RDC,
  • Pidan al comité de sanciones de la ONU que prevean sanciones dirigidas contra los altos responsables ruandeses (como el general Kabarebe), ugandeses y congoleños que han actuado para desestabilizar el este de la RDC y que son directa o indirectamente, responsables de los crímenes cometidos contra las poblaciones civiles.

Frente a la situación que prevalece en la ciudad de Goma, una plataforma de las organizaciones de la sociedad civil, la AETA, interpela a todos los actores políticos, a todas las tendencias confundidas y a los actores sociales a superar las divergencias que los debilitan y los dividen en beneficio del mayor interés de la Nación, de la unidad y de la integridad territorial. Así, AETA, aconseja que se mantenga un diálogo congolo-congoleño para resolver la situación del Kivu.  Según AETA, solo queda el diálogo y es la vía privilegiada para salvaguardar la integridad territorial de la RDCongo, protegerla, defenderla hasta el sacrificio supremo, sin tener en cuenta las divisiones políticas internas.

Según AETA, “el dialogo político congolo-congoleño que ha de implicar a todos los actores políticos, tanto los de la mayoría al poder, como los de la oposición dentro y fuera del parlamento, la oposición armada y  los actores sociales y económicos del país, sigue siendo la vía recomendada para resolver la crisis”. En efecto, el dialogo interno se impone como la solución apropiada y duradera para esta crisis en la medida en que el País no tenga la posibilidad de levantar una armada moderna, equipada, muy bien formada y motivada, que sea capaz de anular las fuerzas negativas que con apoyo del exterior, operan dentro del país,

 

 

 

                                  POR LA PAZ EN RDCONGO

             FIRMAR Y DIFUNDIR LA CARTA A CATHERINE ASHTON

Alto representante de la UE para Asuntos Exteriores y política de seguridad

 

¡A 25 de noviembre son 1378 las firmas recibidas!  Gracias a todos.

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Traducción al español dentro del proyecto PerMondo para la traducción gratuita de páginas web y documentos para ONG y asociaciones sin ánimo de lucro. Proyecto dirigido por Mondo Agit. Traductora:  Sofía Casado

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